RINCÓN DE LA JARDINERÍA

Para poder crear nuestro propio invernadero en el cole vamos a utilizar una estantería de metal muy usada y vieja, a la que vamos a dar un lavado de cara.

Primero la hemos forrado con papel continuo de colores, ya que la pintura de metal era costosa y dedicada mucho más tiempo de elaboración. La tarea de forrado tanto de las patas como de los estantes fue dura, pero poco a poco se fue logrando.

Para proteger los estantes decidimos colocar planchas de cartón pluma, así podremos poner cosas encima sin dañar el papel. Los medimos con cuidado y los fuimos poniendo en cada uno de los estantes.

Una vez terminada, la volvimos a anclar a la pared. La estantería estaba en otro lugar del aula, y se decidió cambiar para que las futuras plantas pudieran recibir más luz, al estar colocadas cerca de la ventana.

Como todo el mundo sabe, un buen espacio de trabajo necesita tener un cartel para hacerlo bonito y para que los alumnos puedan identificarlo. Para hacer el cartel hemos tenido que usar diferentes materiales.

Primero tuvimos que medir bien la distancia entre los barrotes para calcular  la superficie del cartel. Después elaboramos el título del rincón y colocamos algunos dibujos para decorarlo.

¡Esto marcha! Ya tenemos la mitad del rincón montado. Solamente queda saber para qué va a servir cada una de las baldas. Hemos colocado también algunas instrucciones sobre cómo plantar en semilleros y cómo trasplantar la planta en huerto o en maceta… ¡qué ganas de ponernos en marcha!

Por fin ya tenemos nuestro rincón terminado. No le hemos puesto protecciones pero… ¿a qué es divertido?

Además, y ya para terminar, hemos creado un pequeño fichero con algunas plantas de interior y otras de huerto, para conocer sus condiciones de luz, agua, temperatura y sustrato; y hemos forrado dos cajas, una para guardar los semilleros y otra para guardar materiales como palas de cultivo.